La palabra putx ha sido uno de los instrumentos más poderosos para controlar la sexualidad femenina. Un insulto que atraviesa culturas y generaciones, diseñado para domesticar el deseo, marcar límites y sembrar miedo.
En esta charla de 90 minutos exploraremos cómo se construyó socialmente la sexualidad de las mujeres —cis y trans— y por qué el estigma de la puta sigue siendo el eje central de ese control. Desde el “¿qué llevaba puesto?” para justificar violencias hasta el matrimonio moderno como institución de regulación de los cuerpos, veremos cómo estas narrativas atraviesan lo íntimo, lo colectivo y lo político.
Reivindicar el placer no es un lujo: es un acto político. Esta charla abre la pregunta sobre cómo transformar el insulto en bandera, el miedo en potencia y el deseo en camino hacia relaciones libres de violencia.
$20.00
30 in stock
I acknowledge the Whadjuk Noongar people as the Traditional Owners of the land on which I live and work. I pay my respects to their Elders past and present, and extend that respect to all First Nations peoples. This always was and always will be Aboriginal land—sovereignty was never ceded.